LA IMAGEN ROTA

A BILINGUAL PAGE TO COLLECT AND DISCUSS COMMENTS ABOUT FILMS, THEATER AND ART AND SOME POLITICS. ENGLISH/SPANISH

Tuesday, March 27, 2012

COSAS QUE SUCEDIERON UN DIA Y PUEDEN SUCEDER DE NUEVO.
Amén (2003) es un extraordinario film de Costa Gavras que examina los vínculos entre el Vaticano y la Alemania Nazi. El personaje central es Kurt Gerstein (Ulrich Tukur), un oficial de las Waffen-SS empleado en el Instituto de higiene del SS, para diseñar programas de la purificación del agua y la destrucción de parásitos, se sorprende al descubrir que el proceso que ha desarrollado para erradicar el tifus, utilizando una mezcla de cianuro de hidrógeno llamada Zyklon B, ahora se utiliza para matar a judíos en las cámaras de gas de los campos de exterminio. Gerstein intenta notificar al Papa Pío XII (Marcel Iureş) sin éxito alguno. Sólo Ricado Fontana (Mathieu Kassovitz), un joven sacerdote Jesuita, es capaz de llevar este mensaje al Papa pero no obtiene respuesta por parte de su Santidad, que está consciente del holocausto.
AMÉN

Monday, March 26, 2012


THINGS THAT HAPPEN ONCE 
AND COULD HAPPEN AGAIN

BEWARE OF HISTORY

Monday, March 19, 2012

Á TRAVÉS DE UN ESPEJO OSCURO
Por Sergio Giral
La presencia de los artistas cubanos que viven en la Isla, intérpretes, plásticos y ahora los cineastas que visitan la Ciudad Mágica Miami y muestran sus obras, siempre ha depertado pasiones y controversias. Es más que sabido en Miami habitan cerca de dos millones de cubanos y sus descendientes. formado en primer orden por un exilio perjudicado al arribo del nuevo orden revolucionario y otro, los menos, los afectos a la pasada dictadura de Batista. Estos abandonaban a sus familiares y estilo de vida por primera vez, ya que el cubano no tenía tradición emigrante, al contrario, la Isla era un emporio de inmigrantes del mundo entero y en su historia se destacaba el exilio y el destierro sólo por motivos politicos. Desde aquellos hasta pasar por la radicalización del regimen contra la clase media, la persecución a discidentes y religiosos, el exodus del Mariel con su bochornoso actos de repudio, hasta los que se sentaron al banquete de Baltazar, comieron del festín y entendieron a tiempo el mensaje escrito en la pared, esta pasión es facilmente comprensible y goza de empatía. Generalmente el ser humano niega y desprecia aquello que lo martirizara y humillara, si es que tiene conciencia del daño que ha sufrido, no padece de amnecia o del Síndrome de Stokholmo, pero medio siglo es un tiempo muy largo donde nacen y crecen varias generaciones que viven en penosa armonía con su destino manifiesto; unos temen enfrentarlo y vencerlo y otros arriesgan a perder la libertad y la vida tratando de derrotarlo. Es un tiempo muy largo que también genera cansancio, apatía, cinismo y produce una generación irrresponsable, desinformada y casi alegre, dispuesta a apoyar por convicción o conveniencia los designios de régimen, sin dejar a un lado la quimera de escapar a la Ciudad Mágica de Miami, como verdadera solución a su existencia. Esa generación producto del laboratoio del Dr. Moreau es manipuladora y facilmene manipulable a la vez. Gozan de los acuerdos de USA de reunificación familiar, derecho universal inalienable, que en muchos casos se convierten en festivas vaciones al Norte de la Floria y ostentosas visitas a la Isla depauperada. Producto de ese va y ven, resulta natural reencontrar signos y códigos reconocibles de ambos lados. La música oida en Miami parece haberse escuchado ayer en la Isla; el film cubano que ha sido exhibido en la Isla se estrena en Miami; el cantante, músico, bailarín o el de cualquir otra disciplina del arte entrevistado en la televisión de Miami, se confunde con otra identica realizada por los canales de la Isla; los paladares de la Isla sirven comida que semejan al menú de los restaurantes cubanos en Miami; las fotos y videos de cubanos utilizados por el regimen para reprimir al moviento politico de Las Damas de Blanco muestran indumentaria reconocibles de Miami; el cielo, las nubes, la luna, el sol y las estrellas parecen ser los mismos. Todo se convierte un reflejo opuesto, en una imagen invertida donde el espejo y el sujeto se confunden hasta llegar a creer que está viendo una extension de la realidad o la misma. Los cubanos que padece de este syndrome focal que los obliga a colocar sus emociones a ambos lados del espejo, amen de las rajaduras, poseen el don de la ingravidez, los hábitos del avetruz, acuden a la solución de Pilatos y por tanto poseen la absoluta ausencia de compromiso político. No es cuestión de cuestionar al arte ni al artista, ni despreciar si viene de Tebas o no, tan solo es cuestion de situarse racionalmente a un lado del espejo y creo que la mejor posición es frente a él.

Thursday, March 15, 2012

VIVIR EN BABIA
Por Sergio Giral
Después de haber publicado en este blog varios atículos sobre cineastas cubanos, unos vivos y otos muertos, que merecen mi admiración y respeto, me asalta una reflexión sobre el reconocimiento del artista y su obra realizada bajo los auspicios del gobierno  cubano o cualquier vínculo con este y aquellos que residen en otro país y han determinado ser independientes de ideas y actos del regimen cubano. Existen varias recursos para poder medir la efectividad de estos cineastas y sus films fuera de Cuba, ya sea en festivales y el mercado internacional. Una premisa para estos cineastas es no tener un país que los represente, ya que los films se clasifican por la producción nacional, sea esta cual fuera. Es decir, que un film realizado por un cineasta cubano que reside en Estados Unidos de América y que no mantienen relación o compromiso con el estado cubano es clasificado Made in USA, obviando su identidad nacional y artística y reduciendo su posibilidad de participación en el mercado y los festivals internacionales de cine. Otros de los aspectos limitantes en estas selecciones es el tema de estos films que generalmente inciden en la problemática del exilio cubano y que son visto en muchos casos de forma capciosa o indiferente, no así los producidos en Cuba, aúnque fueran de carácter propagandístico del regimen, que son considerados documentos de la vida nacional de un país o que llaman la atención por incluir elementos de crítica al régimen cubano, lo suficinetemente sutiles para escapar a la censura oficial. Creo que los cinestas cubanos, en Cuba o fuera de allí, no están obligados ha tratar el tema politico para cumplir con la historia; aúnque inevitablemente el arte, por su poder cognositivo establece compromisos sociales y politicos aúnque el artista no se lo proponga. No dudo que Velazques no soportara a las Meninas y que Rubens, nombrado caballero a la vez por dos reinos enemigos Felipe IV de España y Charles I de Inglaterra, no sorportara a su protectora la reina Maire de Medici. Resulta difícil escapar al “endrumuria” política del momento y el reconocimiento de los jerarcas mentores. Esta realidad se puede comprobar en la selección de films realizados por cubanos fuera de Cuba, que no cuentan con una coproducción o ayuda de alguna entidad oficial cubana, en los festivales internacionales de cine.
Otro aspecto definitivo es la preferencia de productores e inversionistas extranjeros en proyectos de tema cubano a realizar en la isla y su indiferencia a los realizados fuera de esta. Tomemos el caso de Leon Ichaso, un director de cine forjado en Hollywood y con un lugar en el mercado americano; dos de sus filmes, Azucar amarga y Paraiso, filmados en el exilio con tema político y con producción independiente son ignorados y han recibido poca atención de críticos y distribuidores más interesados en los productos fílmicos realizados en la isla.  Otro de los casos es el film Cercanía de Rolando Díaz, filmado en Miami con actores cubanos de primera línea que tampoco recibió la atención del Festival de cine de Miami. Esta realidad tiene sus raices años atrás con los films de cubanos exiliados que sufrieron el desprecio de festivales internacionales de cine. En 1987 a Jorge Ulla y Nestor Almendros no se les permitió presentar Nadie Escuchaba, un documenal sobre los derechos humanos en Cuba,  en el Festival de Nueva York; Conducta Impropia (1984) de Nestor Almedros, que denuncia los campos de concentración de UMAP para homosexuales, grupos religiosos y disidentes fue considerada "un ataque a la estabilidad de la revolución cubana" por el entonces Presidente de ese Festival. Otro tanto sucedió con el documental 8-A de Orlando Jiménez Leal, sobre el juicio y fusilamiento del General Arnaldo Ochoa. Casos como estos llevaron a varios cineastas cubanos a acusar al Festival de cine de Nueva York “de mantener un patrón de intolerancia hacia films realizados por exiliados cubanos que denuncian el régimen de Fidel Castro".
En busca de una solución personal a este conflicto he presentado en festivales internacionales de cine y a la crítica mi film, Dos Veces Ana, recientemente realizado en Miami, como una producción CubanoAmericana y aúnque esta denominación no sea considerada una categoría oficial en estos festivales mejor define a sus creadores y participantes y establece la identidad de su verdadera producción.
Estas consideraciones van más allá de la genealidad y la maestría de cineastas exiliados desde Tarkovsky a Chaplin, de Jules Dassin a Patricio Guzmán, de Forman a Yalzadeh, de Nestor Almendros a Solanas, sino por la necesidad de definir la verdadera naturaleza del cine del exilio que está determinada por un exilio político sin posibilidades de retorno, mientras se viva en Babia.